martes, 5 de enero de 2010

misterios - la flechada



Cuando una familia nativa desea construir su casa, una habitación, o alguna otra parte de la casa, cumplen con ritos ancestrales a la Pachamama, bendiciendo la tierra, el agua, herramientas y demás complementos a fin de que la obra se realice sin dificultades. Transcurrido el tiempo necesario, levantada la casa, en la habitación principal de la misma se llevará a cabo una nueva ceremonia denominada flechada. De la parte media del tirante que sostiene el techo, cuelga un espaciado tejido que a manera de cesto sostiene un huevo. Esta parte central está adornada de coloridos pompones. Perpendicularmente desde el cesto al piso de la habitación cavan un pequeño hoyo, donde deberá caer el contenido del huevo una vez rota la cascara de este. El dueño de la casa con anticipación elige entre familiares, amistades y vecinos a los flechadores para cumplir este rito, con lo que la casa quedará inaugurada y bendecida por la Madre Tierra. Cada flechador utiliza su arco y flecha. Inician la competencia ritual ordenándose el círculo alrededor del hueco. Con paso lento dan vueltas implorando felicidad y prosperidad para la familia dueña de casa. La flechada en sí comienza cuando el primer participante lanza la flecha al huevo, de fallar en el primer intento podrá repetir las veces que pueda en el lapso de tres vueltas alrededor de la habitación, cumplido este tiempo el siguiente flechador efectuará su propósito y así sucesivamente hasta que uno resulte triunfador. Se expande agua bendita en toda la habilitación a la vez que queman aromáticos sahumerios. Se declaran compadres al dueño de la casa y al triunfador de la flechada. Todo esto se realiza para liberar de visitas de malos espíritus. Festejando luego en forma prolongada hasta el nuevo día.