Referente al paye, se edito en el diario clarín de Bs. as con fecha del 14 de agosto del año 1986 el siguiente relato a lo cual he reformado un poco para darle mas realismo a la historia. Los gendarmes de paso de los libres tienen un enfrentamiento con contrabandistas en la margen derecha del río Paraná. Hubo tiros, gritos, y corridas, y después de una larga batalla, cuatro delincuentes son capturados. En la confusión uno se escapa, pero un gendarme le descarga la ametralladora, este creyendo que herido había caído en las cercanías, sale en su búsqueda, sin hallar rastro del contrabandista herido.
Al otro día con las luces de la mañana, una patrulla sale en la búsqueda del cadáver que se creía que estaba en los alrededores, pero nada se encontró. Solamente mucha sangre…sangre y pisadas que marcaban un círculo.
El informe señala que quizás fue caído al agua y devorado por las pirañas, pero al cabo de 14 días un mariscador da aviso a la policía, que en el paraje denominado “las lechiguanas” había un hombre casi destrozado pero con vida tirado entre unos matorrales del lugar. Gendarmería lo encuentra y lo traslada al hospital zonal. Los médicos no podían entender como este hombre sobrevive en el lugar con 27 disparos de bala calibre 12 en todo el cuerpo, en estado moribundo, sin alimento, las piernas cangrenadas, y en estado inmóvil por tener la columna quebrada. Y recuerda el medico de apellido Álvarez, que el moribundo le dice, “sácame el paye del brazo che Rubicha” “sácamelo así puedo morir de una ves” y mientras decía estas palabras , toma la mano del medico y le hace tocar el brazo derecho donde tenia un bultito…el medico llama a otro colega que era medio supersticioso, y este comprende que pedía el moribundo, y tomando un bisturí, saca del brazo derecho a la altura del músculo bíceps un huesito pequeño con forma de calavera, y al instante el hombre muere, sin terminar de decir sus palabras…Aguiyebe che rubicha,
